Una segunda opinión puede marcar la diferencia
Cleveland Clinic, reconocida internacionalmente, ofrece un punto de contacto local para los pacientes que buscan una consulta o tratamiento por sus problemas de salud.
Los pacientes a quienes se les ha diagnosticado una enfermedad o padecimiento potencialmente mortal, pueden buscar la segunda opinión de un especialista para garantizar la validez del diagnóstico inicial y el mejor curso de tratamiento. A veces, una persona puede querer una segunda opinión cuando simplemente no se siente bien y cree que puede estar sufriendo de un padecimiento que no se ha detectado, o no se ha diagnosticado correctamente. Obtener una segunda opinión puede brindar al paciente la tranquilidad necesaria para mitigar los temores que pueda tener sobre su salud.
Muchos pacientes locales viajan a Cleveland Clinic en Florida y Ohio para obtener una segunda opinión o para recibir tratamiento en cualquiera de las áreas de especialidad de ese sistema hospitalario. Cleveland Clinic es uno de los principales sistemas de salud de EE.UU., y ocupa el puesto número 1 en cardiología y cirugía cardíaca desde 1995. Otros programas especializados de alto rango incluyen cáncer, enfermedades digestivas, urología, ortopedia, neurología y neurocirugía, entre otros.
Para programar la visita y viajar al campus de Cleveland Clinic en Ohio o Florida basta con una llamada. Los Servicios Para Pacientes Internacionales (GPS, por sus siglas en inglés) de Cleveland Clinic es un departamento de servicio completo que ha sido diseñado para satisfacer las necesidades y requisitos singulares de los pacientes internacionales, atendiendo a casi 8,000 pacientes en más de 90 países cada año. El personal multilingüe entiende que los viajes médicos pueden ser estresantes y hacer todo lo posible para que cada paciente y su familia se sientan a gusto.
Cuando un paciente quiere ir a Cleveland Clinic, ya sea por recomendación o por cuenta propia, inmediatamente recibe el acompañamiento de un representante de Cleveland Clinic, a fin de que ese paciente se sienta acogido y tranquilo, ayudándolo en todo momento en los requerimientos necesarios para su viaje. “Cleveland Clinic también colabora con entidades de atención médica en todo el mundo, desarrollando y optimizando prácticas médicas que mejoran los servicios de salud y elevan la experiencia del paciente.”
Una vez inscrito el paciente, un coordinador de servicios para pacientes recibe todos los registros médicos y puede hacer recomendaciones para servicios de traducción si fuera necesario, y también recomendar viajes y hospedaje para los pacientes visitantes. Cuando la persona llega a Cleveland Clinic, un representante de los Servicios Para Pacientes Internacionales ayudará durante la visita.
“Hacer que los pacientes se sientan especiales en este momento crítico es nuestra prioridad. Cuando somos capaces de abordar su preocupación médica con compasión y recomendar el mejor tratamiento disponible, sabemos que hemos hecho nuestro trabajo", agrega Ivan Blanco, Senior Director of Business Development & Global Patient Services for Latin America.
La fibrilación auricular
- Esta enfermedad es la responsable del 15% de todos los accidentes cerebrovasculares.
- Entre sus sistemas están: palpitaciones, fatiga, dificultad para respirar y molestias o presión en el pecho.
Panamá 16 de febrero de 2018. En nuestro país, según cifras de la Caja de Seguro Social, para el año 2017 se registró que las enfermedades cerebrovasculares fueron la tercera causa de defunción con un 8.7% y enfermedades isquémicas del corazón representaron la cuarta causa con 8.6 %.
Actualmente la fibrilación auricular representa alrededor del 15% de probabilidad de provocar enfermedades cerebrovasculares, ocasionando que el sistema eléctrico del corazón se descontrole, lo que causa una disminución de la circulación sanguínea y un ritmo cardíaco irregular o arritmia.
Robert Cubeddu, jefe del departamento de cardiología de Cleveland Clinic Florida y cardiólogo intervencionista, señala que “La fibrilación auricular se desencadena por una dirección errónea del ritmo eléctrico del corazón. Los impulsos rápidos se disparan simultáneamente, causando un ritmo irregular en las aurículas o en las cámaras superiores del corazón.”
El ritmo cardíaco promedio de una persona varía de 60 a 100 por minuto, pero para alguien con fibrilación auricular, puede variar entre 100 y 175 por minuto; algunas personas que padecen esta enfermedad, viven con esta condición por años sin saberlo.
Sin embargo, el Dr. Cubeddu sostiene que "Durante un período prolongado, la fibrilación auricular puede debilitar significativamente el corazón e incluso provocar insuficiencia cardíaca.”
Acerca de los procedimientos para la fibrilación auricular, José Baez-Escudero, cardiólogo de Cleveland Clinic, explica que los tratamientos se enfocan en recuperar un ritmo cardíaco normal, controlar la frecuencia cardíaca y prevenir la formación de coágulos sanguíneos para reducir el riesgo de accidentes cerebrovasculares. Estos generalmente comienzan con cambios en el estilo de vida y medicamentos. Sin embargo, es posible que los medicamentos no recuperen la frecuencia cardíaca normal y los anticoagulantes no sean bien tolerados por todos los pacientes. En este caso, un procedimiento puede ser necesario, asegura Baez-Escudero.
Existen varias técnicas innovadoras, que incluyen la cardioversión eléctrica, la ablación con catéter, la terapia con dispositivos y la ablación quirúrgica. La mejor opción dependerá del ritmo cardíaco y los síntomas, así como también del tiempo.
Cuando un paciente tiene fibrilación auricular, los impulsos eléctricos irregulares impiden que la sangre se exprima completamente de las aurículas. La sangre se acumula en el apéndice auricular izquierdo, formando coágulos que pueden causar un derrame cerebral.
Para aquellas personas con fibrilación auricular que tienen un mayor riesgo de accidente cerebrovascular, hay otras alternativas disponibles para cerrar el apéndice auricular izquierdo. “El WATCHMAN™ un dispositivo autoexpandible en forma de paracaídas que sella el apéndice auricular izquierdo, evitando que libere coágulos; se implanta a través de un catéter en la sala de cateterismo”; señala el Dr. Cubeddu. Aunque no requiere cirugía, puede realizarse bajo anestesia general.
“Cleveland Clinic Florida reúne especialistas en cardiología, electrofisiología, cardiología intervencionista, cirugía cardíaca e imagen cardiaca con amplia experiencia”; dice el Dr. Baez-Escudero. Proporcionar un enfoque multidisciplinario ofrece a los pacientes el mejor resultado y una mejor calidad de vida, afirmó.
Uso de cirugía robótica para tratar el cáncer de próstata
En las últimas décadas, los procedimientos quirúrgicos se han vuelto más fáciles gracias a los avances en la tecnología. Esto ha dado como resultado tiempos de recuperación más breves, menos complicaciones y estadías más reducidas en el hospital.
Un ejemplo es la cirugía de próstata laparoscópica y robótica realizada por el departamento de urología y riñones de Cleveland Clinic Florida. Este tipo de cirugía tiene como objetivo tratar a los pacientes con cáncer de próstata mediante el uso de dispositivos tecnológicos.
En la cirugía abierta de próstata, este órgano se elimina mediante una incisión de tamaño más grande en la parte inferior del abdomen, mientras que en la cirugía laparoscópica las incisiones se hacen con agujeros que se utilizan para insertar un instrumento visualizador iluminado (laparoscopio) en la región pélvica. Esto le permite al médico examinar y extirpar la próstata sin tener que realizar una incisión abdominal de tamaño mayor.
Estos procedimientos se realizan a través de pequeñas incisiones que no cortan los músculos. La prostatectomía laparoscópica y robótica ofrece a los cirujanos una mejor visualización del área, lo que permite extraer la próstata con precisión. Los pacientes también experimentan una pérdida de sangre considerablemente menor. A diferencia de la cirugía abierta tradicional, la cirugía laparoscópica y robótica solo requiere de cuatro a cinco pequeñas incisiones. A través de estas incisiones y valiéndose de un potente endoscopio de alta precisión (una cámara minúscula) e instrumentos quirúrgicos especializados, el cirujano extirpa la próstata.
Ambas técnicas son mínimamente invasivas para realizar una prostatectomía radical contra el cáncer. En la prostatectomía laparoscópica, el cirujano se coloca junto a la mesa de operaciones y manipula los instrumentos él mismo, mientras que en la prostatectomía robótica, el experto está sentado cerca del paciente al lado de una consola robótica, desde donde controla los instrumentos robóticos para realizar la operación. El robot reproduce con precisión las complejas maniobras que realiza el cirujano.
“Los beneficios son similares entre la cirugía de próstata robótica y la laparoscópica. Los pacientes generalmente pueden irse a casa el día después de la cirugía de próstata”, explica el doctor Nicolas Muruve, urólogo de Cleveland Clinic Florida. “Los pacientes que se someten a cirugía de próstata robótica y laparoscópica generalmente experimentan menos dolor y molestias postoperatorias y tienen una recuperación más rápida. También experimentan hemorragia intraoperatoria considerablemente menor”.
Los avances en investigación y tecnología han contribuido a las altas tasas de curación relacionadas con la prostatectomía radical y la radioterapia para el cáncer de próstata. El grado de función sexual después de la prostatectomía radical está determinado por muchos factores, como la edad del hombre y la actividad sexual que tenía antes del procedimiento. Después de una prostatectomía radical, la mayoría de los hombres experimenta al menos problemas de erección temporales. Basada en su experiencia con miles de pacientes, Cleveland Clinic ha creado un programa diseñado específicamente para ofrecer un enfoque multidisciplinario dirigido a mejorar la calidad de vida después de la cirugía del cáncer de próstata. El programa combina la experiencia de cirujanos urológicos de renombre mundial, endocrinólogos, psicólogos y fisioterapeutas, y ofrece pruebas diagnósticas integrales y tratamientos clínicos para el paciente.
En el proceso postoperatorio, la estadía en el hospital es de uno o dos días. Cleveland Clinic es responsable de proporcionarle al paciente la atención diaria en su ingreso y de darle instrucciones detalladas después de la cirugía, antes de ser dado de alta. Se recomienda no conducir un vehículo durante los siete días que siguen a la cirugía. No están restringidas las actividades físicas en el período postoperatorio, solo se recomienda hacer lo que el paciente puede tolerar.
Cleveland Clinic fue el primer hospital de Estados Unidos en realizar regularmente cirugías de próstata laparoscópicas y entre los primeros en realizar prostatectomía radical robótica. Con el sistema quirúrgico robótico más avanzado, aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés), las cirugías laparoscópicas y robóticas permiten a los cirujanos realizar este procedimiento complejo de una manera mínimamente invasiva, con más precisión y ofreciendo así mejores resultados a los pacientes.